Posibilidades de las técnicas de GPR basadas en la interferometría de Coda, en el análisis del deterioro biológico de estructuras de madera laminada encolada

Desde hace unos años, los daños provocados por organismos xilófagos (carcomas, termitas y hongos de pudrición) en las estructuras de madera han aumentado de manera muy significativa. Actualmente, para estimación del grado de deterioro biológico, además de los clásicos punzones, las empresas de control emplean otro tipo de equipos como resistógrafos, emisores de impulsos sónicos o ultrasónicos, etc. Por desgracia, también estos dispositivos presentan varias limitaciones: mediciones locales, lentitud de los procedimientos, peso excesivo de los equipos, maniobrabilidad, accesibilidad, etc. En resumen, que la evaluación del nivel de deterioro biológico, especialmente en el caso de ataques incipientes, no es posible llevarla a cabo con precisión. Con el fin de evitar los problemas que plantean los equipos de ensayo actuales, se ha analizado la posibilidad de evaluar con mayor precisión el nivel de degradación biológica en elementos portantes de madera laminada mediante metodologías no destructivas basadas técnicas de georradar (GPR – Ground Penetrating Radar). El trabajo expone las posibilidades del GPR en la estimación del grado de degradación por organismos xilófagos en este tipo de estructuras. Se ha utilizado este tipo de material porque, al tratarse de un estudio inicial, se ha optado por aplicar esta tecnología a secciones de piezas homogéneas, sin defectos o singularidades tales como fendas de secado, acebolladuras o incluso desviaciones de fibra, más frecuentes en secciones de madera aserrada. Además este tipo de elementos estructurales son los que alcanzan mayores dimensiones y secciones; y por ende, mayor dificultad en su inspección.