Desarrollo sostenible en tiempos de crisis. Enfoque español en energías renovables.

Abstract

En este trabajo se da una idea de todo lo concerniente a la sostenibilidad, en el contexto de la crisis económica actual (2008-2016) española. El país ha sufrido los efectos de una gran recesión y ha sido perjudicado especialmente por su exposición al sector inmobiliario. No obstante, España es uno de los líderes mundiales en aspectos como las energías renovables, el estado del bienestar o el progreso social. Con estas condiciones, España constituye un buen elemento de análisis. En algunos aspectos, finalizaba con paso firme el año 2007, después de haber duplicado su PIB desde 2002. Sin embargo, a partir del año 2009, muchas personas han pasado dificultades que, en muchos casos, el Gobierno no ha sabido solucionar. Los motivos de esta inacción pueden encontrarse en unas posibles debilidades en aspectos como la ética y el comportamiento de las élites quienes, como es lógico, se preocupan por sus intereses. Las leyes educativas y el sistema que dibujan también tienen una gran influencia en el comportamiento de la sociedad y, a través de él, se puede formar a la sociedad en buenas prácticas que, además del interés personal, busquen la transformación hacia un mundo mejor y justo. Las empresas son igualmente actores principales del desarrollo sostenible porque con su actividad generan innovación y empleos verdes. A través de la responsabilidad social fomentan, además, la sostenibilidad, que reflejan en planes de lucha contra el cambio climático o mediante el mantenimiento de un buen clima laboral. En este estudio se analizarán una serie de factores que explican el avance de España en los últimos siete años, en los que el país estuvo inmerso en una gran crisis económica, peor que la vivida en los años 80, debido a que en aquel momento a España le quedaba mucho por evolucionar. Ahora que ha tocado techo es más difícil estructurar una burocracia pesada que no facilita la actividad. También se analizarán los compromisos mundiales en materia de sostenibilidad, algunas de las políticas europeas y, sobre todo, la estrategia Europa 2020 de crecimiento integral. Esta estrategia recoge muchos de los pactos internacionales, como el Protocolo de Kioto o los acuerdos de Naciones Unidas. Para concluir, se proponen algunas recomendaciones de las posibles vías de actuación, que están justificadas en base a los números presentados. No obstante, a lo largo del texto se ponen de manifiesto muchos datos, actuaciones y críticas, que también son válidos como ejemplos de las decisiones que dieron buen o mal resultado y de qué tipo de trámites se deben llevar a cabo para reconducir el país. La conclusión es que la gestión, si bien en un contexto muy difícil, se ha visto afectada por las malas previsiones y el hecho de que no se ha utilizado todo el potencial que poseía el Estado, para afrontar una época dura con sostenibilidad y hacer los ajustes estructurales necesarios para salir reforzados hacia el 2020.