RUO Principal

Repositorio Institucional de la Universidad de Oviedo

Ver ítem 
  •   RUO Principal
  • Producción Bibliográfica de UniOvi: RECOPILA
  • Artículos
  • Ver ítem
  •   RUO Principal
  • Producción Bibliográfica de UniOvi: RECOPILA
  • Artículos
  • Ver ítem
    • español
    • English
JavaScript is disabled for your browser. Some features of this site may not work without it.

Listar

Todo RUOComunidades y ColeccionesPor fecha de publicaciónAutoresTítulosMateriasxmlui.ArtifactBrowser.Navigation.browse_issnPerfil de autorEsta colecciónPor fecha de publicaciónAutoresTítulosMateriasxmlui.ArtifactBrowser.Navigation.browse_issn

Mi cuenta

AccederRegistro

Estadísticas

Ver Estadísticas de uso

AÑADIDO RECIENTEMENTE

Novedades
Repositorio
Cómo publicar
Recursos
FAQs

El plano semántico del lenguaje: el resultado de una optimización

Autor(es) y otros:
Álvarez Prendes, EmmaAutoridad Uniovi
Fecha de publicación:
2003
Editorial:

Asociación de Jóvenes Lingüistas

Citación:
Interlingüística, 14, p. 107-118 (2003)
Descripción física:
p. 107-118
Resumen:

Un rasgo inherente al lenguaje natural es la vaguedad (la borrosidad o la imprecisión, entendidas éstas, según lo postulado por Lofti A. Zadeh, no como el resultado de nuestra ignorancia o una forma de encubrirla sino como una cualidad intrínseca del conocimiento humano, dada la imposibilidad de establecer límites precisos en determinadas categorías del mundo). En este trabajo nos hemos especialmente interesado por el estudio de la presencia de la vaguedad en el plano semántico (es decir, aquel que organiza la relación de los signos lingüísticos con el mundo extralingüístico). Y se ha observado que la mayor parte de dichos signos son signos vagos, difusos o borrosos. Por tanto, a la hora de iniciar un proceso comunicativo, hallaremos vaguedad no sólo en la información implícitamente transmitida sino también en la información semiótica o codificada (= la vehiculada por tales signos lingüísticos). La frontera entre esos dos tipos de comunicación [comunicación semiótica y c. inferencial] quedará, pues, en cierta medida diluida, al igual que lo hará la contribución de lo que tradicionalmente se ha denominado 'código'. Mas no supone esto problema alguno que comprometa el éxito de la comunicación, dado que la mayor parte de nuestros intecambios comunicativos se resuelven satisfactoriamente, y ello es debido tanto a la configuración de las capacidades cognitivas del ser humano como a las condiciones mismas del propio proceso comunicativo. La vaguedad no constituirá entonces ninguna tara o defecto del lenguaje (como durante siglos se creyó, especialmente por parte de lógicos y filósofos), sino que, al contrario, la fuerza y la plasticidad del mismo procederán precisamente de ella. El diseño del lenguaje natural se nos revela, pues, en definitiva, al menos en su plano semantico, como el resultado de una optimización (= se han obtenido los maximos beneficios en relación con el mínimo coste o gasto proporcionalmente posible).

Un rasgo inherente al lenguaje natural es la vaguedad (la borrosidad o la imprecisión, entendidas éstas, según lo postulado por Lofti A. Zadeh, no como el resultado de nuestra ignorancia o una forma de encubrirla sino como una cualidad intrínseca del conocimiento humano, dada la imposibilidad de establecer límites precisos en determinadas categorías del mundo). En este trabajo nos hemos especialmente interesado por el estudio de la presencia de la vaguedad en el plano semántico (es decir, aquel que organiza la relación de los signos lingüísticos con el mundo extralingüístico). Y se ha observado que la mayor parte de dichos signos son signos vagos, difusos o borrosos. Por tanto, a la hora de iniciar un proceso comunicativo, hallaremos vaguedad no sólo en la información implícitamente transmitida sino también en la información semiótica o codificada (= la vehiculada por tales signos lingüísticos). La frontera entre esos dos tipos de comunicación [comunicación semiótica y c. inferencial] quedará, pues, en cierta medida diluida, al igual que lo hará la contribución de lo que tradicionalmente se ha denominado 'código'. Mas no supone esto problema alguno que comprometa el éxito de la comunicación, dado que la mayor parte de nuestros intecambios comunicativos se resuelven satisfactoriamente, y ello es debido tanto a la configuración de las capacidades cognitivas del ser humano como a las condiciones mismas del propio proceso comunicativo. La vaguedad no constituirá entonces ninguna tara o defecto del lenguaje (como durante siglos se creyó, especialmente por parte de lógicos y filósofos), sino que, al contrario, la fuerza y la plasticidad del mismo procederán precisamente de ella. El diseño del lenguaje natural se nos revela, pues, en definitiva, al menos en su plano semantico, como el resultado de una optimización (= se han obtenido los maximos beneficios en relación con el mínimo coste o gasto proporcionalmente posible).

URI:
http://hdl.handle.net/10651/26463
ISSN:
1134-8941
Colecciones
  • Artículos [37532]
Ficheros en el ítem
Compartir
Exportar a Mendeley
Estadísticas de uso
Estadísticas de uso
Metadatos
Mostrar el registro completo del ítem
Página principal Uniovi

Biblioteca

Contacto

Facebook Universidad de OviedoTwitter Universidad de Oviedo
El contenido del Repositorio, a menos que se indique lo contrario, está protegido con una licencia Creative Commons: Attribution-NonCommercial-NoDerivatives 4.0 Internacional
Creative Commons Image