Relación interprofesional entre el personal médico y de enfermería en cuatro unidades de cuidados críticos del HUCA

Abstract

INTRODUCCIÓN: Según diversos estudios, una fluida relación entre los profesionales de enfermería y medicina tiene múltiples ventajas, por el contrario, en un ambiente sanitario donde la colaboración es mínima, aumentan las incidencias. A pesar de trabajar en el mismo entorno, los obstáculos entre estos profesionales siempre han sido evidentes, de hecho han mantenido en cuantiosas ocasiones relaciones de dominación, indiferencia o incomprensión mutua. En el pasado las relaciones entre el personal médico y de enfermería, no eran muy buenas, sino bastante problemáticas, lo que suponía una enorme barrera a la colaboración. Todavía en pleno siglo XXI, la evidencia sigue mostrando que hay personal médico que no tiene claro el papel del profesional de enfermería. Aunque sí que es verdad que últimamente, hay una mejor colaboración entre ellos. Los roles de estos profesionales pueden ser distintos, pero igual de importantes en la asistencia a los pacientes. Por lo tanto, la comunicación entre el personal médico y de enfermería es una pieza clave en todo el proceso asistencial. OBJETIVOS: Determinar el nivel de relación interprofesional entre personal médico y de enfermería en cuatro unidades de cuidados críticos del HUCA. Describir si hay diferencias significativas entre el personal médico y de enfermería. Describir si hay diferencias significativas entre las cuatro unidades de cuidados críticos. METODOLOGÍA: Estudio descriptivo transversal del 1 de abril del 2013 al 15 de abril del 2013 en cuatro unidades de cuidados críticos del HUCA, que son: UCI de Residencia, UCI Pediátrica, UCI de Silicosis y UCI Cardiaca. La población elegible fueron 165 profesionales de medicina y enfermería. Criterio de inclusión: participación voluntaria. RESULTADOS: Un total de 129 profesionales de la salud, es decir un 78’2%, entre personal médico y de enfermería, participaron en el estudio. La distribución de la participación según la categoría profesional fue de 79’8% para el personal de enfermería y de 72’2% para el personal médico. La distribución de la participación según la unidad fue: 91% UCI Residencia, 84% UCI Pediátrica, 100% UCI Silicosis y 40’4% UCI Cardiaca. La edad media de los participantes fue de 37 años. La distribución de los participantes por sexo fue de 108 mujeres, un 83’7% y 21 hombres, el 16’3%. La distribución de los participantes según el estado civil fue de 54 solteros, el 41’9%, 65 casados, el 50’4%, 6 separados o divorciados, el 4’6%. La distribución de los participantes según si tenían hijos o no fue de 59 sí, el 45’7%, 67 no, el 51’9%. La media de los años trabajados en las unidades fue de 10’9 años. La distribución de los participantes según el contrato laboral fue de 58 fijos, el 45%, 59 interinos, el 45’7%, 10 eventuales, el 7’7%, y 2 MIR el 1’5%. CONCLUSIONES: El porcentaje total de participación ha sido alto, con lo cual si es representativo de la población, sin embargo, no lo ha sido en alguna de las unidades, lo que pudo haber llevado a cometer un sesgo potencial. El personal médico y de enfermería tiene una actitud positiva hacia su relación interprofesional. Los profesionales de enfermería tienen una actitud más positiva que los profesionales de medicina hacia su relación interprofesional. Todas las unidades de cuidados críticos tienen una actitud positiva hacia la relación interprofesional entre el personal médico y de enfermería. La UCI Pediátrica y la UCI de Residencia son las que tienen una mayor actitud positiva hacia la relación interprofesional entre el personal médico y de enfermería, y por el contrario la UCI de Silicosis y la UCI Cardiaca las que tienen una menor actitud positiva.